martes, 13 de septiembre de 2011

El Castellar. Toma II


Como ya anunciamos por Facebook y Twitter, este fin de semana tuvimos el placer de compartir una fantástica quedada en el Castellar con los compañeros de Escaladores de Extremadura (Pedro, Raúl, Anaïs, Gonzalo y nosotras).

Quedamos a las 10.00 en la Ermita de Belén, un lugar amplio y relativamente fácil de encontrar para reunirnos, y desde allí, poder salir hacia el Castellar todos juntos, pues el acceso a la zona de escalada está un poco complicado, sobretodo porque al ir varios coches, no podíamos aparcar arriba del todo del Camino Colorado, sino que teníamos que aparcarlos un poco más abajo para dejar espacio en la carretera.

Una vez aparcamos los coches, emprendimos el camino hasta los pies de las rocas y elegimos un sector que fuera amplio para tener bastante espacio y varias vías diferentes.


En esta ocasión, como en las veces anteriores que hemos estado, finalmente nos quedamos en el Sector de los Hartitos. ¿Por qué?. Fácil... Es el primero que aparece al entrar por una mella de la roca, casi en medio de la sierra, y con el calor que hace todavía, cuando ves la primera vía es como agua de mayo. También hay que decir que ya está todo bastante limpio de cardos, aunque no tanto de cacas de ovejas (que con tanto comer cardo...) y las paredes están cargadas de musgo (es recomendable llevar un cepillito para ir limpiando la roca, que con la ayuda de todos, queda reluciente).




Las vías que hicimos iban desde un IV hasta un 6a ya que el grupo era muy variopinto (todos menos el pobre de Pedro, que nos aguantó, teníamos un grado bastante bajo), pero la verdad, todas las vías fueron muy bonitas y disfrutadas, porque al final, cada una tiene su encanto.



Empezamos por unas vías cortitas (66 y 67 en la imagen) para calentar y tomar contacto con la roca. Estas vías se conocen como “Ay que hartito estoy” (IV+) y “Hartito estoy de picar” (IV). Son vías relativamente fáciles, cómodas, cortas, pero con pasos muy bonitos.

Cuando ya pasamos todos por estas vías, nos desplazamos un poco a la derecha para montar (bueno, que Pedro montara y nosotros tuviéramos la oportunidad de disfrutar) las vías más altas de este sector. Mientras Pedro montaba la vía marcada con el 70 ("Búfalo Bill" V+), nosotros montábamos la número 71, un IV nominado "Gorilas en la niebla".



A partir de este momento, hay que decir que el calor hizo un poco de mella en el grupo, pero nada, nosotros a lo nuestro… (los buitres que nos rondaban no tenían las mismas expectativas que nosotros).

Por último, se montó la vía número 69, “Aníbal el caníbal”, un 6a con desplome a mitad de la vía.. ¡mi primer desplome en roca!.

En resumen, y por no extendernos mucho más, pasamos un gran día de escalada en compañía de buena gente, y ya estamos deseando preparar otra quedada en aquella zona, o en la nuestra (mejor, por no repetir), lo mismo da, mientras sea en tan buena compañía.